Cuando tenía catorce años, me enamoré perdidamente de un chico de mi clase que quería ser ilustrador. A mis padres no les gustaba porque decían que era “un bala perdida” pero era creativo y divertido y muuuuuy guapo. La cosa no salió bien. Con los primeros amores, es lo que suele pasar. Una pena, porque me habría ahorrado una pasta en ilustradores ahora (Afortunadamente, mi marido no lee mi blog).

Elegir tu dominio es como elegir pareja para toda la vida. Y todos sabemos lo complicado que es acertar en esto a la primera. ¿Por qué es tan complicado elegir un dominio? (Lo de la pareja ya lo dejo para otros con más conocimientos de psicología del comportamiento).

Por varios motivos:

  • Tu dominio es el nombre con el que se te va a conocer y el que van a asociar a tu marca personal. ¿Eres capaz de identificarte ahora con otro nombre? No, ¿verdad? Tu nombre te diferencia de los demás.
  • La elección del dominio que hagas influye en tu posición en las búsquedas de Google.
  • Quieres que sea sencillo de recordar, para que la gente lo pueda buscar fácilmente.
  • Un dominio transmite una imagen de ti. Si tu dominio es pepitoperezeldelpueblo.com, la imagen que das es distinta que la de joseperez.com

Punto 1: tener claro tu público objetivo

 

Sí, sí, me vas a tirar piedras porque soy más remachona que el pepino con lo del público objetivo. Pero es que es fundamental que, antes de elegir cualquier dominio, tengas muy claro a quién te diriges. Sobre todo, porque si no lo sabes no vas a elegir un nombre adecuado.

Punto 2: opciones a la hora de elegir tu dominio

 

La opción más frecuente: tu nombre. 

Si eres escritor y quieres posicionar tu blog de escritor, lo normal es usar tu nombre y tus apellidos, seguidos del .com o del .es (o de lo que quieras). Por ejemplo, la web que aúna todo mi contenido es www.anagonzalezduque.com 

Ventajas: no vas a cambiar de nombre. Así que, incluso cambiando de temática como hice yo al principio, el posicionamiento del dominio se mantiene. Pero al principio no te ayuda en el SEO. Porque cuando no te conoce ni pirri nadie te busca por tu nombre.

Desventajas: si tienes un nombre muy frecuente, es muy probable que tu dominio no esté disponible.

 

Segunda opción: tus palabras clave

Usa una frase o concepto pequeño como dominio. Lo lógico es usar una frase en la que expliques el concepto de tu web. Por ejemplo, www.marketingonlineparaescritores.com o www.escueladeescritores.com

Ventajas: te ayuda muchísimo a posicionar en Google si tu objetivo es el ser el referente en una temática. Ojo, esto no quiere decir que de hoy para mañana por usar las palabras clave el blog se posicione. Conseguir que un blog destaque en Google es un trabajo de pico y pala de muchos meses porque al principio Google pasa de ti como de la m.

Una mezcla de los dos anteriores es la tercera opción

Pon que tienes un nombre muy frecuente y el dominio con tu nombre está ya pillado. Puedes añadirle a tu nombre la palabra escritor. Así estás diciéndole a quién caiga en tu blog que eres escritor y también puedes posicionar tu nombre.

Por ejemplo: www.fulanitofernandezescritor.com

Punto 3: errores que no debes cometer al elegir tu dominio

Google es una máquina. Muy inteligente pero una máquina, así que no le compliques la existencia.

  • No pongas símbolos raros en el dominio, ni tildes, ni ñ. ¡Cuidado porque esos dominios te los venden!
  • No uses números en el dominio.
  • No uses guiones bajos ni altos. No uses guiones, vamos.
  • Intenta conseguir siempre el .com

¿Cómo saber si mi dominio está disponible? 

Compruébalo en este enlace de Webempresa. Intenta siempre elegir el .com. Es mucho más generalista que un .es. ¿Por qué te pongo la página de Webempresa? Por varias razones: la primera es porque tus datos personales permanecen ocultos si lo pides, sin necesidad de pagar más como en otras empresas de hosting. Es lo que se llama privacidad whois.

Porque también es gratuito el certificado SSL que establece una conexión segura entre tu dominio y el navegador y es una de las cosas que Google valora en su algoritmo. Es eso que ahora vemos que se traduce en una s al principio de la dirección de tu blog: https.

La renovación del dominio también se hace de forma automática. Y esto, que puede parecer que no es de agradecer, sí que lo es. ¿Por qué? Porque, a veces, si te despistas en renovar, hay unos “malos” llamados buitrejos de dominios que especulan con ellos. Si tu blog está posicionado, pueden estar al tanto de cuándo te toca renovar y pillar tu dominio.

¿Tienes más dudas sobre tu dominio?

Como he visto que es una de las cosas que más dudas generan a la hora de hacer un blog, si tienes más dudas sobre cómo elegir un dominio para tu blog de escritor, déjanoslas en los comentarios :D.