¿Has tomado alguna medida para evitar el plagio de tu novela?

Ah, ¿no?

Vaya. 

Así que eres de esos.

Sí. Sí. De esos que piensan así:

• Quién me va a plagiar a mí mi novela.
• Si yo soy un escritor de medio pelo…
• Seguro que buscan a otros antes de mí.

Pero, ¿te has enterado de lo que pasó el pasado mes de julio?

Si no, entiendo que pienses así.

Fíjate.

Se pilló a una chica que había sido la más lista de todo el barrio.

O al menos es lo que se creía.

Vendía libros de otras escritoras en Amazon de una manera que se merece un premio por su originalidad, la verdad.

Descargaba el libro, le cambiaba la portada y el nombre y listo.

Magia potagia. Un nuevo libro a su nombre.

Hay que admitir que puede que originalidad para escribir sus novelas no tuviera, pero lo que son recursos le sobran.

¿Y sabes qué?

Que con escritores consagrados esto no funciona.

Te arriesgas a que en cualquier momento alguien que lo descubra.

Pero con escritores más desconocidos…

Si tienes registrado tu libro, con una simple reclamación quitarás esa obra de mercado y en el caso que quieras, pasarás a mayores.

En el caso de que no lo tengas, tendrás que atravesar una odisea mucho más grande para que la justicia te dé la razón.

¿Quieres evitar el plagio? ¡Más vale prevenir que curar!

Mi abuela siempre me lo decía…

Y la vida me ha demostrado que casi siempre llevaba razón.

Hubo una vez que me dijo que la fecha de caducidad era solo orientativa y que no pasaba nada si me comía ese yogur.

Maldito yogur.

Pero volviendo a temas literarios —que asumo que son los que más te interesan—, la prevención manda.

¿Sabes por qué?

Porque si esperas a tomar medidas a que alguien te haya plagiado la obra, apaga y vámonos.

Antes de que te des cuenta te habrás metido en un follón de tres pares de narices.

Tienes delante de ti la oportunidad de evitar cualquier problema tan solo con una acción.

Así que, si de verdad quieres a tu novela como si fuera un hijo —y sé que hay alguno que lo quiere todavía más—, cuídalo como si lo fuera.

Si registras la novela, te quitarás de encima el problema de que puedan plagiarte.

Por ello en este artículo te quiero contar el paso a paso cómo puedes hacerlo.

Vamos, lo que te diría tu abuela: si quieres evitar el plagio de tu novela, ¡regístrala!

Bueno. Es cierto que en mi caso me habría insultado antes de cerrar esas exclamaciones. Pero ya me entiendes.

¿Es obligatorio registrar tu novela?

La respuesta es que no. No existe ninguna obligación. Pero es muy recomendable.

Es como comer verduras y hacer ejercicio. Obligatorio no es, pero a la larga es lo más inteligente.

De hecho, te quiero advertir que por mucho que esté registrada no se acabará el riesgo de ser plagiada, robada o pirateada.

Ojalá fuera así, pero no es un conjuro de protección a lo Harry Potter.

Lo que sí que hará será ponerte mucho más fácil cualquier reclamación legal que pueda surgir.

Es el método más efectivo para evitar el plagio y solucionarlo si ocurre.

Así que por el pago que tienes que hacer, merece la pena.

Y ya sabes lo que dicen —y creo que te lo repetiré mucho a lo largo de este post—, más vale prevenir que curar.

Esto es como tener una copia de seguridad de los archivos de tu ordenador. Te parece una tontería hasta que el ordenador se te rompe.

Ahí solo te queda respirar si la tienes y llorar si no.

Yo soy más de respirar. ¿Y tú?

¿Cómo puedes registrar tu libro para evitar el plagio?

Aunque existen muchísimas opciones para registrar tu novela y evitar el plagio —o por lo menos tener un buen medio de defensa—, yo te recomiendo dos.

• Registro de la Propiedad Intelectual (RPI).
• Safe Creative (SC).

¿Por qué solo estas dos?

Porque en ellas aúnas lo más importante de la protección: un sistema público (RPI) y uno privado (SC).

El resto de las opciones son redundantes. ¿Te protegen? Por supuesto. Pero no te sumarán más derechos a la hora de presentar cualquier reclamación.

Safe Creative: un buen lugar donde empezar a mirar

Empecemos por el menos conocido.

Safe Creative es una de las plataformas privadas más interesantes que existen hoy en día.

Te permite asociar a tu obra una política de cesión de uso a través de modelos predefinidos de Creative Commons, GNU u otros sistemas.

Es decir, tú decides cómo los terceros podrían utilizar tu obra.

Por cierto, aunque tenga un nombre tan internacional, tienen una sede en España. Concretamente en Zaragoza. 

Esto es importante porque te asegura que Safe Creative se regirá según las normativas españolas.

Todo el proceso funciona vía internet y de manera gratuita hasta 10 registros al mes. Así que o eres un autor hiperprolífico o no tendrás ningún problema.

Por cierto, si escribes 10 libros al mes te pido que me lo cuentes en los comentarios. Quiero conocer tu secreto sí o sí.

¿Cómo es el proceso de registro en Safe Creative?

El proceso de registro de tu novela en Safe Creative es muy sencillo.

A diferencia del Registro de la Propiedad Intelectual, aquí tendrás que realizar todo el proceso online.

1. Sube el archivo con tu obra. Puedes hacerlo tanto en PDF como .doc
2. Rellena los datos de tu obra. Cuanto más exhaustivo seas, mejor.
3. Auditoría y derechos. Indícale a la plataforma que aceptas los derechos morales y de explotación.

Registro de la Propiedad Intelectual

Seguro que es del que has oído hablar. Todos los países tienen uno y en España está gestionado por cada Comunidad Autónoma.

Aun así, con que lo inscribas en el tuyo es suficiente para que sus efectos se apliquen en toda España.

Se trata de un trámite para la protección de los derechos de autor sobre tus libros.

También toca otro tipo de creaciones, pero este es el caso que te interesa a ti.

Por cada registro tendrás que pagar un mínimo de 13,20 euros que se puede ampliar. De todas formas, la inscripción básica es suficiente para evitar el plagio y reclamar tus derechos sobre tu obra si se diera una situación complicada.

Vale para toda la vida y puedes realizarlo tanto de forma física como de forma telemática si cuentas con el certificado digital.

¿Cómo es el proceso de inscripción en el Registro de la Propiedad Intelectual?

Como te contaba más arriba, cualquier obra literaria está protegida por la Ley de Propiedad Intelectual por el simple hecho de crearla.

No obstante, si surge un problema es mucho más recomendable que la tengas inscrita porque te ayudará a hacer valer tus derechos de forma contundente y rápida.

Por eso te quiero explicar paso a paso cómo puedes registrar tu obra en el Registro de la Propiedad Intelectual y así dar un paso hacia delante para evitar el plagio de tu libro.

Existen dos posibilidades para inscribir tu libro en el Registro de la Propiedad Intelectual:

• Registro telemático.
• Registro presencial.

Si quieres descubrir cómo puedes hacerlo con cada uno de ellos, continúa leyendo.

Registro telemático

1. Necesitas un certificado digital.
2. Accede a la página del Ministerio y elige en qué Comunidad Autónoma registrarás la obra.
3. Rellena todos los formularios requeridos y adjunta el libro que quieres proteger.
4. Abona la tasa y firma la solicitud de forma digital.
5. Descarga la copia en formato PDF y guárdala en un lugar donde puedas encontrarla.

Registro presencial

1. Acude al Registro Territorial o a las Oficinas Delegadas.
2. Cumplimenta allí la solicitud y lleva el ejemplar de la obra a registrar.
3. Paga la tasa.
4. Vuelve al registro para llevar el justificante del pago.

¿Lo ves?

Es fácil y rápido.

Eso sí. Si vas a acudir en estos tiempos al registro presencial de tu Comunidad Autónoma, te quiero recomendar que llames antes y preguntes. Estando como están las cosas, igual hay algún detalle que te interese conocer.

Échale un vistazo a las Entidades de Gestión

Además de en los dos lugares que te he mencionado antes, también puedes registrar tu libro para evitar el plagio en entidades de gestión colectivas.

Como sé que este nombre te suena a chino, quiero darte la definición que te ofrece Wikipedia:

Las sociedades o entidades de gestión colectiva son organizaciones creadas por leyes de propiedad intelectual o por acuerdos privados para el manejo colectivo de derechos de autor y derechos conexos. 

Básicamente se tratan de organizaciones privadas que, por unos determinados acuerdos que hay, protegerán tus derechos como escritor.

En España hay dos muy importantes:

• Sociedad General de Autores y Editores (SGAE).
• CEDRO.

Estoy convencido de que has escuchado hablar de la primera, aunque no tanto de la segunda.

Si me permites el consejo no solicitado, date de alta. Es la que  te permitirá cobrar regalías en conceptos de derechos de autor si te toca.

Veo muchas opciones, pero ¿cuál es la mejor?

La opción que siempre debes manejar es la del Registro de la Propiedad.

Como decía un profesor de Derecho Administrativo que tenía, esto es impepinable.

La Ley de Propiedad Intelectual —que es a la que te acogerás al registrarlo— reconocerá tu derecho sobre la obra por el mero hecho de crearla.

Sin embargo, si hay algún problema te será mil veces más fácil reclamar tu derecho sobre la misma si tienes la obra registrada.

De esta manera, no tendrás que probar tu autoría o tu titularidad. Será la otra persona la que tenga que probar la suya.

Es decir, que la obra será tuya mientras no se demuestre lo contrario. 

Sin embargo, ¿qué hubiera pasado si no hubieras tenido la obra registrada?

Justo lo que ahora le tocará hacer a la otra parte. Tendrás que encargarte de justificar que tú eres el autor de ese libro.

Y como te puedes imaginar, esto implica y meterse en un follón curioso curioso.

Casi que mejor prevenir antes que curar para no pillarse las manos, no crees?

¿Por qué te recomiendo registrar tu libro para evitar el plagio?

Registrar tu libro te permitirá evitarte problemas en el futuro.

Sé que es un poco rollo hacerlo, pero te olvidarás para siempre.

Piensa que has trabajado muy duro en tu obra.

¿Un año? ¿Dos? ¿Muchos meses?

Da igual.

Como si la hubieras escrito en tan solo unas horas. 

Lo importante es que es tuya. El fruto de tu trabajo y de tu esfuerzo.

Te mereces protegerla.

Piensa que con un solo registro y un pago muy pequeño podrás proteger tu obra y evitar el plagio de una manera mucho más sencilla.

Solo por irte a la cama tranquilo merece la pena.

¿La inscripción del libro en el Registro de la Propiedad es gratis?

No.

Cualquier tipo de registro conlleva un pequeño pago.

Como has visto más arriba, las cuotas son irrisorias y solo tienes que abonarlas una vez.

Sinceramente, creo que merece la pena pagarlo si eso te asegura que a la hora de evitar el plagio de tu novela tendrás un arma muy poderosa.

No obstante, están previstas de esta manera para que nadie se tire el día registrando tonterías.

Piensa que por el coste que tiene lo amortizarás con pocos libros vendidos.

Haz caso a lo que decía tu abuela.

¿Puedo realizar el registro completo por Internet?

Sí.

Puedes realizarlo todo por internet. Hoy en día con los certificados digitales ya no existe ninguna necesidad de que acudas a ninguna parte.

Aun así, también cuentas con una opción presencial por si te es más cómodo.

Aunque en tiempos de pandemias…yo te recomiendo en general que te hagas con los permisos que necesitas para tratar con la Administración siempre por la vía digital.

Es mucho más rápido y te ahorrarás un montón de dolores de cabeza.

Es como si se te abriera otro mundo delante de las narices.

¿Puedo registrar una idea de mi posible futura novela?

La respuesta es que no.

Lo que se registra es una obra y no una idea. De hecho, la Ley de Propiedad Intelectual es muy clara en este tema.

Además, sería imposible probar que has sido tú la primera persona que ha tenido esa idea.

Tienes que pensar que el Registro de la Propiedad tienen la misión de dar fe pública de que tú eres el autor de la obra, pero la obra en realidad es tuya desde el principio.

Solo te está ayudando a probarlo.

¿Te he convencido para registrar tu libro?

Espero que sí. Pero también soy consciente de que puedes tener ahora muchas preguntas en la mente.

¿Qué te parece si me dejas cualquier duda que tengas por aquí abajo y me encargo yo mismo de responderte?

Recuerda que registrar tu libro es lo mejor que puedes hacer sin ninguna duda.

¡Mucho ánimo con esa obra con la que ahora estés trabajando!