13 razones que provocarán tu rechazo editorial

Hoy es el día del padre. Todos los que escribimos sabemos que una obra es como un hijo al que cuidar con todo nuestro corazón. Y como con cualquier retoño, nos asustan los peligros que se pueda encontrar cuando sale ahí fuera, al mundo real. Y nos asusta el rechazo editorial.

Y, bueno, también creemos que es el más bonito del mundo y somos todo menos objetivos con ellos.

Que quizá con un niño esto sea maravilloso (que no, aunque yo no soy padre y no puedo opinar), pero con tu libro es una mala decisión.

¿Puedes minimizar las posibilidades de un rechazo editorial?

Con este artículo te quiero ayudar a minimizar los motivos de riesgo de rechazo editorial para que aprendas a enviar propuestas mucho más interesantes a las editoriales.

A pesar de todo, habrá circunstancias que no estén en tus manos, así que el mejor consejo que te puedo dar para ello es que no te preocupes demasiado. Pon todo lo que tengas en lo que sí que depende de ti y ve a por todas.

Al final es como educar a un hijo. Tú puedes poner todo tu corazón e inteligencia en la tarea, pero todo se puede torcer por elementos ajenos a ti o que has sido incapaz de prever.

Además, es igual de importante que entiendas que un rechazo editorial no es una indicación de que eres mal escritor. Para nada.

Es un motivo para mejorar. Pero este impulso debe ir más allá de tu libro. Puede que tu problema se encuentre en la propuesta. Esto es un mundo enorme.

Para que te hagas una idea, a Jesucristo lo negaron tres veces… pero esa es otra historia.

Para vencer a tu enemigo has de conocerlo: motivos de rechazo editorial

No sé quién sería el sabio que te diría por primera vez que para vencer a tu enemigo antes has de conocerlo, pero tenía razón. Y mucha.

Una de las claves para evitar tu rechazo editorial es trabajar con conciencia para minimizar las posibilidades de que tu libro reciba un «no». Y existen muchos factores que puedes controlar para ofrecer la mejor propuesta posible.

Las editoriales no son una ONG: quieren vender

Hay muchas ideas que me encantaría que se quedaran plasmadas en tu mente y que te ayudarán a vencer al rechazo editorial. Esta es una de ellas. Y posiblemente, la más importante.

Una editorial no es una ONG. Es una empresa que tratará de maximizar sus beneficios.

Por tanto, uno de los elementos que determinará si tu obra es contestada con un rechazo editorial o no será, precisamente, la viabilidad económica del proyecto.

Lo que quiere decir que mucho más allá de tu historia, primará la rentabilidad potencial de esta.

Para que lo veas todavía más, estoy seguro de que en muchas ocasiones te has encontrado un libro publicado y has pensado que el manuscrito que te han rechazado por enésima vez posee más calidad literaria.

Todo se reduce a las pelas, al final.

Sé que has crecido y mirado al mundo literario con la idea de que una editorial es una especie de arca mágica que se encarga de llevar las historias de los mejores autores hasta los lectores, que están ávidos por consumirlas. Pero nada más lejos de la realidad.

Por supuesto que quieren publicar grandes historias, pero todas ellas tienen que estar cortadas por un patrón de rentabilidad económica.

Cuando antes lo veas de esta manera, más perspectiva tomarás del sector y más efectivo serás en el proceso.

El tema de tu libro está pasado de moda y bailaría con el polvo en una librería

Este motivo está hilado con el anterior.

Mira, si una editorial apuesta por tu libro es porque está convencida de que podrá generar dinero.

Evidentemente que también lo hará porque tu obra es buena. Sin embargo, sin el primer condicionante se quedará en el baúl de los recuerdos y la única respuesta posible es un rechazo editorial.

¿Y a dónde quiero llegar con todo esto?

A que por mucha calidad que tenga tu obra, si te has empeñado en publicar sobre una temática que ya nadie quiere leer, estarás perdido. La editorial no lo querrá porque hará sus cifras económicas y se encenderá la luz roja del peligro.

¿Un consejo? Evita seguir las modas. Sé siempre tú mismo. Intenta encontrar patrones en el mercado, pero nunca renuncies a eso que solo tienes tú y que puede convertir tu obra en atemporal.

Es mucho más difícil que pase de moda una personalidad, querido autor.

Para ser más efectivo en este tipo de decisiones te ayudaría mucho una sesión estratégica. Será un paso para que descubras cómo tomar las mejores decisiones en tu carrera como autor.

Además, quiero aprovechar este punto del artículo para pedirte que nunca descartes por completo la autopublicación. Siempre será una oportunidad que, además, te ayudará a conocer los pormenores del sector y te ofrecerá una visión mucho más amplia.

Tu nombre no garantiza ventas

Seguro que en más de una ocasión has escuchado —y puede que pronunciado— aquello de que a Fulanito solo le publican por su nombre y no por su calidad.

¿Y sabes qué? Es más que probable que en más de una ocasión hayas tenido razón. Y sí, toca volver a hilar con el apartado anterior.

Pero con matices.

La verdad es que la mayor parte de las veces que lo hayas escuchado solo haya envidia detrás, pero la realidad siempre supera a la ficción de los celos.

¿Un autor vende solo con su nombre? Únicamente después de una dilatada trayectoria de obras que han enamorado a las masas.

De hecho, cuando se realizan este tipo de acusaciones siempre se olvida la parte del trabajo de detrás y pueden llegar a ser bastante desconsideradas.

Porque hay personas que con solo colocar su nombre en la portada generan una gran atención, pero para ello hay un trabajo detrás que siempre se dejan de lado por oportunismo.

Pero lo importante aquí es que el nombre de la portada siempre importa y que si tú quieres disminuir las posibilidades de un rechazo editorial necesitas construirte una marca personal como escritor que asegure ventas.

¿Cómo? Crea una comunidad basada en el marketing de contenidos que consiga que una audiencia te preste atención y las editoriales te mirarán con mucho mejores ojos a la hora de publicar tu obra. (En la plataforma de cursos encontrarás una formación de marketing de contenidos que te ayudará en este proceso que tan difícil puede parecer en un primer momento).

Puedes crear todo tipo de contenidos. Desde lo más básico que son artículos para tu blog, hasta vídeos de YouTube, podcasts… ¡lo que se te ocurra y que esté relacionado con la literatura!

Porque este último punto es fundamental. ¡Tienen que estar relacionados con la literatura! Y por supuesto, con tu público objetivo.

Así te asegurarás que atraes a un público al que le gusta leer. Y ese esa es siempre la mejor decisión posible.

Convierte a tu página web en el epicentro de tu actividad y emplea las redes sociales como complemento para llevar tu mensaje mucho más allá.

Tienen su calendario de publicaciones completo: ¡llegas tarde, baby!

Aunque te pueda parecer extraño, este es uno de los motivos de rechazo editorial más comunes..

Cada editorial solo puede soportar una determinada carga de trabajo debido a sus recursos.

Por esta razón acostumbran a cerrar los años con antelación. Y en esos momentos ni siquiera el nuevo Don Quijote sería capaz de trastocar sus planes.

De hecho, seguramente un nuevo Don Quijote no lo leería ni tu amigo el erudito.

Lo más habitual es que una editorial cuente en su página web que en este momento está cerrada la recepción de manuscritos. Así que si encuentras este mensaje, ni siquiera te merece la pena enviarlo. Irá directamente a la basura.

Y, escucha, soy consciente de que piensas que tu libro puede ser la próxima gran revelación del mundo de la literatura, pero, piensa en cómo sería al revés.

Imagínate que tú cerraras tu correo electrónico y cada día 29 personas te mandaran sus propuestas cuando has dicho claramente que no quieres recibir nada por el momento.

Tú única respuesta sería enfadarte, eliminar automáticamente esos mensajes y continuar con tu vida.

Pues una editorial seguirá el mismo proceso. Si en este momento tiene su recepción de manuscritos cerrada, entonces no te leerá.

Permanece atento y espera a tu oportunidad. Mientras tanto puedes tantear otras editoriales.

Tu obra no encaja en esa editorial: es mejor buscar otra

¿Te imaginas pensar que eres un fracaso porque el carnicero no te quiere vender fruta?

Pues esto es lo que sucede con muchos autores que envían sus manuscritos a editoriales en las que, evidentemente, no les interesa su libro porque están especializadas en otras temáticas.

Y, claro, se produce un rechazo editorial.

Es inevitable.

Pero supongo que muchas veces un escritor puede pensar que su obra es tan buena que harán una excepción con ella.

O puede que esté tan desesperado por publicarla que la manda a todas partes sin mirar las condiciones.

Spoiler: siempre sale mal.

Pero como ya te digo, depende menos de la calidad de tu obra que del hecho de que cada editorial se especializa en un nicho para conseguir destacar en él.

De hecho, quiero que te pongas durante un instante en la mente de que dijeran: « venga, va, como Fulanito es el mejor escritor de la historia, haremos una excepción».

¿Sabes qué ocurriría? Que te la pegarías por el camino. Porque esa editorial carecería de la capacidad para llevar tu obra a los lugares donde deba estar.

Envía tu libro a una editorial en la que encaje.

Tu libro es menos bueno de lo que piensas y eso se arregla escribiendo más y corrigiendo.

A veces ocurre.

Muchas personas buscan razones sobre su rechazo editorial fuera de su obra y en algunas ocasiones se debe solo a ella.

Un acto muy peligroso si no va acompañado de la humildad y la reflexión.

Si quieres ganarte la vida como escritor emprendedor, necesitas comprender que en algunas ocasiones tus historias serán menos buenas de lo que imaginas y que te tocará volver a ellas para mejorarlas.

De hecho, habrá más de una que descartarás y todo porque comprendas que no será nunca publicable.

Ese libro que has escrito quizás no sea tan bueno como te imaginas. Puede que tengas defectos de estructura, de trama, de estilo, de conflicto, clichés, problemas con los personajes… ¡Pero no pasa nada!

Puede ser el punto de partida de una historia mucho más grande y que tenga todavía mucho trabajo por delante.

O simplemente que has escrito algo que no es potable y que haya que ir ya a por el próximo proyecto.

No pienses que esto solo te puede pasar con tu primer libro. Nadie se libra de tropezones y en cualquier momento un escritor de mucho renombre puede meter la pata.

Así que si recibes un rechazo editorial es muy importante que hagas autocrítica y mires tu obra con ojos objetivos. O mejor, que la mire otra persona que sepa: un lector editorial.

¿Y si tu problema estuviera en la forma y no en el fondo?

Imagínate que tienes una historia magnífica y muy bien narrada, pero que el editor de turno ha decidido que no merece la pena seguir porque le has dado una mala impresión con muchas faltas de ortografía, problemas de organización o vete tú a saber qué.

En la plataforma cuentas con un curso de autocorrección que te ayudará a realizar las mejores presentaciones posibles.

Eso sí, aviso a navegantes. Este paso no sustituye jamás a una corrección realizada por un profesional.

En el caso de que no consigas publicarlo con una editorial tradicional y te lances a la idea de autopublicar, ten claro que necesitarás contratar a un corrector profesional.

Desde Marketing Online para Escritores defendemos el importante trabajo invisible que realizan tantos correctores profesionales en España y al que tan poco visibilidad se le ofrece.

Tu libro es poco original: enciende la chispa que lo convierta en único

¿Sabes cuál es un problema habitual en el mundo de los escritores? Que hay poca originalidad.

Para empezar, quiero que sepas que yo no soy de los que piensa que está todo inventado. Todavía hay mucho espacio para las mentes más creativas.

Sin embargo, esto implica necesariamente que hay que estrujarse los sesos.

Y, claro, como la mayoría de los escritores escribe lo que les gusta y no lo que vende, suele darse una situación muy particular.

Se pone de moda un tema y un escritor decide crear su historia a partir de esa idea.

Como un libro no se escribe de la noche a la mañana y a lo mejor está preparado para ser lanzado un año y medio después.

Total, que el mercado se ha saturado de ese tema y ya es poco original.

Tanto, que la mayoría de las personas prefiere leer otro tipo de historias. Y, por tanto, las editoriales tienen preparado ya el sello de rechazo editorial para cuando te vean aparecer por la puerta.

Por eso es tan importante que sepas ver más allá y que tengas claro cómo te puedes adelantar a las tendencias del sector.

Es una tarea muy complicada. Y sé que es muy difícil pedirte que no te dejes guiar por lo que se lee en el momento y se lleva. No obstante, es importante que hagas lo que hagas tenga tu personalidad. Que sea tuyo y único.

Este motivo de rechazo editorial tiene otra cara de la moneda. Es probable que sin quierer te hayas inspirado demasiado en otro libro del mercado y el editor se haya percatado de ello.

Seguro que para evitarse cualquier tipo de problema o reclamación posterior prefiere descartarlo antes de ponerlo en las librerías.

Trata de crear una historia única, que refleje tu personalidad.

No has enviado una buena carta de presentación: te han dicho que no por vago

¿Sabes que este es uno de los errores más habituales a la hora de enviar un manuscrito?

O bueno, más que un error, una de las muestras de pereza más peligrosas para un escritor.

Y cuando se produce conlleva siempre un rechazo editorial.

Ten cuidado, que hay algunas editoriales que en función de la forma con la que reciban la obra te colocan en una lista de nunca jamás.

Mira, estas empresas tienen una máxima. Si tú no inviertes el tiempo de tomarte la molestia en hablarles sobre tu obra, sobre quién eres y cuál es tu historia, ¿por qué lo harán ellos en leerla?

Y si te digo la verdad, tampoco entiendo la falta de paciencia a estas alturas. ¿Has estado una media de año y medio escribiendo tu obra y ahora te cansas por un simple correo y una presentación adecuada de tu obra?

¡No, hombre, no!

Para que te hagas una idea, esta carta de presentación es determinante a la hora de que una editorial apueste o no por ti.

Te permite contarles por qué tu obra está alineada con la línea de la editorial o de qué manera vuestros valores coinciden.

Y esto es mucho más importante de lo que te puedas imaginar.

No te has currado la propuesta editorial

¿Sabes cómo tienes que presentar tu obra a una editorial tradicional? Eso se llama propuesta editorial. Y tiene mucha más importancia de lo que te crees, porque los editores tienen muy poco tiempo y en esa propuesta tienes que ahorrarles trabajo.

Su papel es el mismo que cuando buscas trabajo y presentas una carta de motivación. Si eliges las palabras adecuadas cambiarás para siempre el resultado. En la plataforma, también hay un curso en el que te explicamos punto por punto cómo debes presentar tu propuesta editorial.

Se nota que se trata de un email genérico: ¡ponte a las teclas!

Este motivo de rechazo editorial es la continuación del anterior, pero con todavía un resultado peor.

Porque denota que, además de no querer invertir una pizca de tiempo en preparar una propuesta para ellos en particular, eres un caradura.

¿Por qué? Porque has enviado un email genérico a todos. De hecho esto es un fallo también frecuente a la hora de pedir reseñas de tu libro.

Vamos a ver, querido autor. Has invertido más de un año y medio en escribir tu obra. ¿De verdad te va a dar pereza ahora invertir quince minutos en preparar un correo electrónico en particular para esta editorial?

Sé que parece irónico, pero es la pura realidad. A las personas les puede la pereza a la hora de redactar este correo.

Aunque sea por razón de decoro, todas las personas del mundo merecen ser tratados de manera individual.

Cuando estás buscando que una editorial apueste por ti, necesitas dar tú también un paso.

También puede suceder que sí que hayas personalizado el email, pero que de alguna manera la editorial haya interpretado que se trata de un email genérico.

¡Podría suceder!

En ese caso, lo más probable es que tu email sea demasiado impersonal. Trata de adaptarlo con un toque más cercano, refiriéndote a la editorial (y si sabes el nombre del editor, también) y que entiendan que es un mensaje único.

Esa editorial no acepta manuscritos no deseados: ¡no insistas!

Este es uno de los pocos motivos de rechazo editorial contra los que poco tienes que hacer. Lo único que tienes entre las manos es no mandarlo y esa es la mejor opción.

Existen editoriales que solo aceptan los manuscritos que ellos mismos solicitan y hay que respetarlo.

Como te he dicho más arriba, seguro que piensas que tu libro es la excepción de la norma y les encantará, se saltarán su canal y querrán publicarlo, pero la verdad es que no suele suceder de esta manera.

Si una editorial no acepta manuscritos no deseados, respétalo. La única respuesta será un rechazo editorial.

Aunque… también existe la posibilidad de que existan otras vías a través de las cuales puedes acceder a una persona clave dentro de la editorial.

Si consigues un contacto dentro, quizás tengas muchas más posibilidades. Merece la pena explorar esta posibilidad.

El libro no engancha al editor

Los editores son humanos, no máquinas. Y puede que en el momento en el que lea tu libro no consigas engancharle. Puede que sea porque a tu libro le falta ese no-sé-qué que te dirá un lector profesional. Pero también puede ser que el editor tenga un problema familiar y leer fantasía juvenil en ese momento se le haga cuesta arriba.

Y sí, esto tampoco depende de ti, así que no te frustres.

Cómo sobrevivir al rechazo editorial

Si has obtenido un rechazo editorial del último manuscrito que has enviado, te toca convivir con ello.

Hay una frase que me gusta mucho que dice que el fracaso inspira a los ganadores y que desmotiva a los perdedores.

Así que tú tienes que decidir en qué lado de la balanza te quieres colocar.

Cuando una editorial te diga que no, que te pasará muchas más veces, tienes que adoptar la actitud proactiva de decir. «vale, ¿qué puedo cambiar en mi estrategia para conseguir que el próximo mensaje me digan que sí?»

Y trabajar en ello.

En el mundo del marketing digital la mayoría de las decisiones se toman por prueba y error.

Actúa de la misma manera en el sector editorial. Trata de probar, corregir, optimizar y volver a lanzar hasta que consigas los resultados que esperabas.

Tómate el rechazo como una crítica constructiva, aunque sea complicado

Esta parte es fundamental.

Mira, lo primero que tienes que tener claro es que una negación no implica que te estén diciendo que no tienes futuro como escritor.

Es una decisión empresarial sobre tu libro.

Como te he dicho más arriba, por supuesto que existe la posibilidad de que tu escrito carezca de la calidad suficiente, sin embargo, puede deberse a muchos más motivos.

Y es importante que aprendas a identificar cuándo la situación es así.

Por tanto, cuando te encuentres ante una situación de rechazo editorial has de decidir cómo quieres contestar.

¿Te vas a quedar lamentándote o buscarás la manera de mejorar tu propuesta y obra para que la próxima vez reciba un sí?

La única manera en la que un escritor emprendedor debería actuar es mediante la aceptación del no y el futuro trabajo por el sí.

En este post has encontrado muchísmos motivos que podrían llevar a una editorial a decirte que no. Ahora te toca a ti identificar cuáles aparecen en tu propuesta y a transformarlos para conseguir un mejor resultado.

Consuélate, no eres el único: escritores que fueron rechazados innumerables veces

Una de las más sonadas es J.K. Rowling. Ahora es la segunda persona más rica de todo Reino Unido (solo superada por la reina), pero no fue siempre así.

Durante gran parte de su vida vivió casi en la miseria. Ni siquiera tenía dinero para poner la calefacción en casa. Y un libro que ahora le gusta a mucha gente como es Harry Potter fue rechazado hasta en más de 16 ocasiones.

¿Eso significó que la historia no valía? Juzga tú mismo. Hoy en día es una de las sagas más valiosas del mundo. Uno de esos pocos mundos que han trascendido del papel y se han convertido en cultura popular.

Hubo una época en la que todos los niños del mundo soñaban con que les llegara a los 11 años su carta de Hogwarts.

Pero bueno, que J.K. Rowling podría haber pensado que no valía y haberse rendido.

Otro nombre que te sonará es el de Stephen King. Aunque no manejo cifras oficiales, creo que es uno de los autores del mundo con más libros publicados.

¿Sabes que empezó a publicar también con un pseudónimo durante un tiempo? No quería que pensaran que tantos libros no podrían salir de su mente, así que decidió esconder su nombre antes de que empezaran a juzgarle.

Y de pronto le sonrió la fortuna. Carrie fue la primera novela que publicó y muy poco tiempo después de que saliera a la luz (tras muchos fracasos) un productor de cine se fijó en ella y le compró los derechos por varios millones de dólares.

No está nada mal para alguien que fue rechazado tantas veces.

George Orwell. Seguro que también te suena el nombre de uno de los autores más famosos de la historia.

Por muchos, incluido yo mismo, está considerado como uno de los mejores. Sin embargo, sus obras tuvieron problemas para ver la luz y el autor llegó a vivir en la semiesclavitud y en la pobreza, como narra en su libro Sin blanca en París y Londres.

Sin embargo, después de pasar por todas las complicaciones que te puedas imaginar, acabó teniendo su oportunidad y se convirtió en uno de los autores y periodistas más importantes de us tiempo.

Una pena que una enfermedad se lo llevara con apenas 40 años. Quién sabe qué más hubiera producido.

Luto y continuar

¿Cuántos rechazos editoriales te han llegado?

¿Uno? ¿Dos? ¿Quince?

¿Qué más da?

Deberían ser insuficientes para que te plantees tirar la toalla como escritor.

Si eres de esas personas que ha nacido con un alma que ansía contar historias, tienes que seguir hacia delante.

Esto es lo que eres y aunque hoy te digas a ti mismo que es suficiente, por tu sangre seguirán fluyendo estas historias.

Necesitarás soltarlas y volverás a querer publicar.

Por tanto, si necesitas un pequeño instante para vivir el luto de la revelación de la verdadera situación del sector editorial, estás en tu derecho.

Pero justo después te tocará avanzar, dar un paso hacia delante y seguir intentándolo.

Ahora tienes en tu mano los principales motivos de rechazo editorial y cuentas con los recursos y las herramientas para vencerlos.

Ve a por ellos.