En el post de hoy vamos a hablar de por qué tu lista de correo importa más que tus redes sociales, eso sí, vamos a partir de una premisa fundamental y es que, aunque la lista de correo debe tener absoluta prioridad en tus tareas, las redes sociales no dejan por ello de ser importantes. Ambas son grandes herramientas que te ayudarán a construir tu comunidad y a llevar tráfico a tu web, que es lo que buscas al fin y al cabo, aunque la primera te ofrece una serie de ventajas que la segunda jamás te proporcionará.

De modo que empecemos el post con una idea clara: no son excluyentes, pero la mayor parte de tu esfuerzo debes dedicarlo a la lista de correo. Al contrario de lo que hace todo el mundo.

Vamos a ver esas ventajas:

Tu lista de correo es tuya y de nadie más

Tú eres quien la controlas

Mientras no nos convirtamos en un Mark Zuckerberg y creemos nuestra propia red social, está claro que ni Facebook, ni Twitter, ni Instagram, ni cualquier otra red está bajo nuestro control. Si formamos parte de ellas, lo hacemos aceptando sus condiciones y, lo que es más importante, los cambios en esas condiciones que en el futuro vayan a suceder.

Así que la primera idea clara que deberíamos fijar en la mente con respecto a las redes sociales es que estamos arando en campo ajeno. Cada uno de los seguidores que conseguimos en ellas son inquilinos suyos, no nuestros y, si al Mark Zuckerberg de turno le apetece, en un abrir y cerrar de ojos puede anular nuestro contrato de arrendamiento con su plataforma y dejarnos sin seguidores.

Por el contrario, tu lista de correo es tuya. Tú eres su propietario. No hay ningún Zuckerberg que sirva de intermediario entre tú y tus suscriptores, de manera que el control sobre esa lista es totalmente tuyo:

• Tienes un acceso directo a la gente que se ha suscrito a tu lista que puedes utilizar según tu conveniencia (el acceso, no a la gente) 😉
• Los contenidos de las newsletters los decides tú.
• Quién pertenece a tu lista de correo y quién no, también.
• Puedes segmentar a tus suscriptores y tener un control total a la hora de comunicarte con ellos, enviándoles contenidos que verdaderamente sean de su interés.
• Y, por supuesto, puedes hacer negocios con ellos.

Y todo ello sin que ningún cambio de algoritmo o condiciones afecte a tus proyectos o suponga una pérdida de seguidores.

La relación con tus suscriptores es facultativa

La lista de correo ofrece otra ventaja y es que quienes se apuntan a ella lo hacen voluntariamente, algo que tiene un significado muy importante: tú les interesas y por eso te han dado su correo electrónico y han aceptado ser tu suscriptor.

Con ello también aceptan lo que Seth Godin llama permission marketing, o sea, te autorizan a que les envíes publicidad de tus productos. Y aquí tenemos un elemento interesante y es que esa publicidad puedes llevarla a cabo de una forma amigable, casi como si se tratara de una conversación personal, un tú a tú que es difícil de conseguir en las redes sociales, donde únicamente puedes soltar tu producto y esperar a que alguien repare en él.

La lista de correo te proporciona un tráfico a tu web mucho más consistente y estable

No hay competencia

Cada vez que escribes un nuevo post en tu blog y lo lanzas a las redes sociales, el enlace que dirige al post está luchando a brazo partido con cientos de otros tuits o posts en Facebook que dirigen a otras webs.

Sin embargo, frente a las múltiples llamadas de atención con las que los tuits de cientos de personas como tú intentan atraer el interés del usuario, tu correo, en el momento en el que este lo abre, es único. No hay ningún otro objeto brillante que reclame su atención. La competencia es nula.

No se desvanece en la Nada

Otra ventaja de tu lista de correo frente a una red social es que el correo es más pausado, en el sentido de que llega al buzón de tu lector y permanece en él, a la vista (salvo que tu lector esté apuntado a un millón de listas de correo que envíen sus mensajes al mismo tiempo que el tuyo y lo hagan bajar en la bandeja), mientras que un tuit publicado en este preciso instante baja de forma inmediata decenas de puestos, ya que hay miles de personas como tú enviando tuits al mismo tiempo, y se desvanece en la Nada.

De modo que hay bastantes más posibilidades de que tu lector objetivo se tope con el correo que le has enviado que con el tuit que has publicado, clique en el enlace y aumente el tráfico a tu web.

Tu lista de correo aporta mayor fidelidad y  compromiso

Un poco más arriba decíamos que la suscripción a tu lista de correo es opcional. Si alguien da el paso, lo hace de forma consciente y eso implica una especie de compromiso contigo: están interesados en lo que cuentas y por ello te dan su correo. Es decir, estás incrementando el número de integrantes de tu público objetivo.

En las redes sociales, cuando, por ejemplo, lanzas un tuit, no puedes estar seguro de que alcanzará al tipo de persona que estás buscando. A veces acertarás, pero en otras muchas ocasiones los algoritmos de las plataformas lo enviarán fuera de la órbita de tu interés, con lo cual se perderá entre unos lectores que no están en absoluto interesados en tu mensaje.

La lista de correo, pues, es más directa y apela al genuino interés del lector, lo cual implica fidelidad, algo sumamente importante para nosotros porque gracias a ella iremos generando confianza.

La confianza, un elemento indispensable

Puesto que la decisión de suscribirse a tu lista de correo ha sido suya, tu suscriptor estará mucho más abierto a establecer una relación contigo. Con el tiempo, no sólo querrá leer los correos que le envíes, sino que conversará contigo, te hará preguntas, te pedirá consejo y poco a poco se irá construyendo entre vosotros una relación más cercana que llevará a la confianza.

Y la confianza genera ventas

Es famosa la frase money is in the list, el dinero está en la lista, y lo es porque representa una verdad incontestable. Vender a puerta fría, ya lo dicen, es muy difícil, pero vender a los suscriptores de tu lista de correo, una vez que has entablado con ellos una relación cercana y te has ganado su confianza, es mucho más fácil que pescar en el revuelto mar de las redes sociales.

Luego, además, está la automatización. No sólo te quita trabajo sino que te ahorra un tiempo que podrás dedicar a otras actividades. En este artículo, Jaume te contó cómo puedes ir montando tu lista de correo paso a paso y habló de las automatizaciones.

Lo mires por donde lo mires, utilizar tu lista de correo como plataforma de venta proporciona un retorno en la inversión mucho mayor que el que ofrecen las redes sociales, tanto en dinero como en tiempo.

Tu lista de correo te permite adoptar mejores estrategias

Gracias a la interacción con tus suscriptores y a un detenido estudio de sus intereses, la lista de correo te permite establecer con ellos una relación mucho más cercana que la que te ofrecen las redes sociales. Puedes hablar con tus suscriptores, preguntarles por sus intereses, por sus preocupaciones y, conforme a la información obtenida, desarrollar las estrategias que mejor convengan. Por ejemplo, en El Fogón, Ana se toma un café todos los sábados por la mañana con sus suscriptores y habla de literatura fantástica y comedia romántica con ellos. Muchos le responden.

Conforme a esa información, podrás experimentar y segmentar, saber qué les interesa y de qué les gusta que hables, lo que hace de la lista de correo una herramienta de análisis muy valiosa.

Tests y segmentación

Créeme, se trata de un instrumento inestimable para hacer pruebas. Puedes realizar test A/B para comprobar qué es lo que mejor funciona, puedes analizar variaciones en los contenidos, puedes personalizarlos, segmentar a tus suscriptores según sus intereses y ofrecerles información y productos perfectamente alineados con sus necesidades.

Todo ello te lleva a un mayor y mejor conocimiento de tus suscriptores, y recuerda lo que dice el famoso refrán: la información es poder, un poder que jamás conseguirías a través de las redes sociales, que no te ofrecen la posibilidad de conocer a tu audiencia tan profundamente como te lo permite tu lista de correo.

Conclusión

Céntrate en la lista de correo y hazla tu prioridad frente a las redes sociales. Ello no obsta para que, como decíamos al principio, una excluya a las otras. Un buen uso de Twitter, Facebook o Instagram es también interesante. A través de las redes sociales puedes llegar a gente que de otra forma quedaría fuera de tu alcance, pero el objetivo debe ser siempre el mismo: conducirlos hasta tu lista y conseguir que se hagan suscriptores. A partir de ese momento, el viento comienza a inflar tus velas y no las del Mark Zuckerberg de turno.

Imagen de portada: Webaroo, Unsplash.